HIPERTENSIÓN ARTERIAL ¿Qué es? La podemos definir como el aumento de la
presión de la sangre de forma crónica. La presión arterial es óptima cuando
la sistólica (cuando el corazón se contrae) es inferior a 120 mmHg y la
diastólica (cuando el corazón se relaja) inferior a 80 mmHg. Como se puede
intuir dependerá de la fuerza con la que bombea el corazón y de la
resistencia que ofrezcan las arterias. Se considera que existe HTA (hipertensión
arterial) cuando la presión sistólica supera los 140 mmHg y la diastólica los
90 mmHg. Hay que tener en cuenta que en la mayoría
de los casos ¿Cómo se
diagnostica? Se hace mediante un seguimiento adecuado,
normalmente tras la comprobación de los niveles de presión arterial en dos o
más lecturas tomadas en un intervalo de varias semanas entre si. ¿Tiene complicaciones? Claro que las tiene, siendo las
principales las cardiovasculares (Ictus, enfermedad arterial periférica,
enfermedad coronaria, insuficiencia cardiaca…). También puede producir
cefaleas, insuficiencia renal, alteraciones en la retina del ojo… Hay que tener en cuenta la posible
asociación con otras enfermedades como la diabetes tipo 2. ¿Existen factores de riesgo? Si existen factores de riesgo
cardiovascular en
No
modificables: Edad, raza sexo, factores genéticos de la herencia. Familiar.
Modificables:
Diabetes, dislipemias, tabaco, sedentarismo, alcohol estrés,
microalbuminuria, insuficiencia renal y Proteina C reactiva elevada. ¿Cómo se trata? Se basará por un lado en recomendaciones
sobre estilo de vida y hábitos dietéticos y por el otro en un tratamiento
farmacológico adecuado:
Hábitos
dietéticos y estilo de vida: Reducción del peso, restricción de la sal en la alimentación,
moderación en el consumo de alcohol, Adoptar una dieta mediterránea,
ejercicio físico y abandono del tabaco.
Tratamiento
farmacológico: Con diuréticos, Alfabloqueadores, etc… |